FIBROSIS PULMONAR
Es una enfermedad caracterizada por disnea de
esfuerzo (problemas para respirar durante el esfuerzo) y tos seca persistente,
sin expectoración. Existe una forma aguda que evoluciona hacia una
insuficiencia respiratoria grave. Consiste en una inflamación y fibrosis
intersticial difusa.
Comienza con una inflamación de los alveolos
pulmonares (alveolitis) como respuesta a lesiones producidas por diversos
agentes, que pueden ser conocidos o desconocidos. El objetivo de la inflamación
consiste en neutralizar o destruir al agente lesivo o infeccioso y el
restablecimiento de la normalidad del tejido en que se produjo. Cuando la
destrucción de dicho tejido ha sido demasiado grande o en casos en que la
lesión afecta a tejidos que no regeneran (como en la inflamación crónica) o
cuando el exudado fibrinoso no puede ser reabsorbido de forma adecuada, se
produce un intento de curación mediante sustitución por tejido conjuntivo
(fibrosis y cicatrización). Es decir, prolifera tejido conjuntivo en la zona
lesionada convirtiéndose en una masa de tejido fibroso.
En la fibrosis pulmonar este proceso no se
detiene y se produce una fibrosis progresiva, tanto de los tabiques
interalveolares como del exudado intraalveolar, que acaba produciendo la
desaparición de la arquitectura pulmonar normal, con los tabiques
intersticiales engrosados. Llega un momento en que prácticamente no se
reconocen las estructuras alveolares del pulmón.
En la mayoría de los casos, los
pacientes presentan empeoramiento clínico y funcional progresivo, con evolución
hacia la insuficiencia respiratoria grave en 5-7 años. En las fases avanzadas
es frecuente la aparición de cor pulmonale e hipertensión pulmonar. Sin
embargo, en ocasiones el deterioro clínico se debe al desarrollo de
complicaciones. En los pacientes con fibrosis pulmonar aumenta la incidencia de
cáncer de pulmón. El 4% de los casos presentan neumotorax y entre el 3 y el 7 %
tromboembolia pulmonar. Así mismo, en estos pacientes existe una mayor
incidencia de tuberculosis pulmonar y son frecuentes las infecciones
bacterianas.
Etiopatogénesis de la fibrosis pulmonar
La etiología de las enfermedades
pulmonares intersticiales difusas probablemente se relaciona con una
interacción entre factores ambientales y genéticos. La predisposición genética
de estas enfermedades viene sustentada
por la existencia de formas familiares de fibrosis pulmonar idiopática (FPI) y
por la presencia de diferentes tipos de enfermedades intersticiales pulmonares
en miembros de la misma familia. Además, no todos los individuos expuestos a
agentes fibrogénicos tales como asbestos y bleomicina desarrollan fibrosis
pulmonar. La importancia del ciclooxigenasa.- 2 (COX-2) en la patogénesis la
FPI se ha demostrado en vivo y en vitro. La baja regulación de COX-2 en la FPI
se ha asociado con la insuficiencia para sintetizar la prostaglandina E2 (PGE2),
un potente inhibidor de proliferación de fibroblastos y de la síntesis de
colágeno. La baja expresión de COX-2 en
el parénquima del pulmón se ha observado en la sarcoidosis, indicando que no es
una característica sólo de la FPI, sino
también un fenómeno involucrado en otras enfermedades fibróticas del pulmón. El
papel los polimorfismos y haplotipos del gen de la COX-2 en el desarrollo y
progresión de la enfermedad, será investigado en la FPI y en la neumonitis por
hipersensibilidad.
La angiotensina II es un mediador con gran
relevancia en la patogenia de la fibrosis pulmonar. La angiotensina II induce
la apoptosis de las células epiteliales, incrementa la proliferación de
fibroblastos y la síntesis de colágeno. El angiotensinógeno es el precursor de
la angiotensina II. Se ha demostrado que existe un aumento de la expresión de
angiotensinógeno en los pulmones de pacientes con FPI. El incremento de la
expresión de angiotensinógeno conduce a un aumento de la producción de
angiotensina II. Se investigará la relación de los polimorfismos y haplotipos
del gen del angiotensinógeno con el desarrollo y la progresión de la FPI.
La patogenia de la fibrosis pulmonar está relacionada con la interacción
de citocinas, mediadores químicos y factores de crecimiento. La angiotensina II
es un mediador profibrótico de gran relevancia. Recientemente, de ha
identificado la enzima convertora de la angiotensina II (ECA-2), un homólogo de
la ECA. La ECA-2 inactiva la angiotensina II y por lo tanto, puede tener una
actividad protectora en el desarrollo de la fibrosis. El papel de la ECA-2 en
la patogenia de la FPI, no ha sido investigado.
La exposición al asbesto constituye el 15% de estas enfermedades. La
inhalación de fibras de asbesto, puede ocasionar una enfermedad pulmonar
intersticial difusa con manifestaciones clínicas y radiológicas similares a las
de la FPI. Se ha observado que algunos casos de asbestosis pueden ser
diagnosticados de forma errónea como FPI si no se ha realizado la determinación
de la concentración de cuerpos de asbesto o fibras de asbesto en el lavado
broncoalveolar o en el parénquima pulmonar. Por tanto, la detección de cuerpos
o fibras de asbesto en el tejido pulmonar y en el lavado broncoalveolar en
pacientes con enfermedades pulmonares intersticiales difusas permitiría
clasificar a la enfermedad pulmonar como secundaria a la exposición al asbesto.